Amor afectivo y efectivo (Mt 5, 43-48)

Para el tema de hoy consideré importante traer una de las enseñanzas de San Vicente de Paul más adelante te platicaré un poquito de él y voy a dejarte al final los temas de consulta para que puedas leer su biografía completa, los que estén interesados. Vamos a iniciar la oración bíblica una vez que terminemos de leer las siguientes palabras y sus significados.

Oración a Dios Espíritu Santo
Oh Dios, que llenaste los corazones de tus fieles con la luz del Espíritu Santo; concédenos que, guiados por el mismo Espíritu, sintamos con rectitud y gocemos siempre de tu consuelo. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.

Lectura: Mt 5, 43-48
43 Ustedes han oído que se dijo: “Amarás a tu prójimo” y odiarás a tu enemigo. 44 Pero yo les digo: Amen a sus enemigos, rueguen por sus perseguidores; 45 así serán hijos del Padre que está en el cielo, porque él hace salir el sol sobre malos y buenos y hace caer la lluvia sobre justos e injustos. 46 Si ustedes aman solamente a quienes los aman, ¿Qué recompensa merecen? ¿No hacen lo mismo los publicanos? 47 Y si saludan solamente a sus hermanos, ¿Qué hacen de extraordinario? ¿No hacen lo mismo los paganos? 48 Por lo tanto, sean perfectos como es perfecto el Padre que está en el cielo. Palabra del Señor

Mensaje de consolación
San Juan de la Cruz un santo místico decía algo muy cierto: -Al final de la vida serás juzgado en el amor-, las prácticas religiosas son para alentar el amor, ninguno va a ser juzgado por su religión, hay un pastor evangélico que escribió un libro titulado “el discípulo”, este pastor se llama Juan Carlos y es Argentino, él decía en su libro que cuando uno se muera, Dios no va a poner a nadie en el cielo para pedir identificación, imagínate: -¿Tú qué religión eres?, -Testigo de Jehová, -Ha! ya marchaste, -¿Y tú que religión eres?, -Budista, -Ha! también ya marchaste, -¿Tú?, -Yo soy Católico Apostólico y Romano, -Mm!, márchele también, ¿Y tú de cuál eres?, -Cuadrangular del séptimo día y del octavo no sé qué, -Esa sí, pásele. Nada más ponte a pensar, como van a hacerle los Yanomami que nadie los ha evangelizado, como van a hacerle los Rusos que nadie les habla del cristianismo o los cubanos que no recibieron catequesis cuando estaban chiquitos porque el país es comunista, como van a hacerle, no van a tener oportunidad; Cristo dice en el evangelio según San Juan capítulo 1: “Él es la luz que alumbra a todo hombre que viene a este mundo”, no sé si ustedes se han fijado que en los rótulos o señalamientos de las autopistas aparece como un escudo que adentro trae un número, ese número te indica la vía en la que uno anda, y nosotros cuando escuchamos a Jesús decir: “Yo soy el camino, la verdad y la vida, nadie va al Padre si no es por mí”, es que nosotros sabemos el número de la autopista, pero hay gente que no ve el escudo, ni tampoco sabe el número de la autopista, pero anda por ahí y llega al objetivo. Y decía este pastor que en el cielo no hay un vigilante que te va a pedir identificación, sino una enfermera con un reloj minutero que te toca el corazón y si el corazón late, pasas; si el corazón se endureció no pasas.

San Vicente de Paul un sacerdote del siglo XVII expresó con claridad una clave potente para el acompañamiento y las relaciones de ayuda en la fase final de la vida. San Vicente repitió varias veces —verbalmente y por escrito— esta hermosa combinación: «amor afectivo y efectivo». Se dirigía así a las Hijas de la Caridad. Imagina una pareja la cual llevan un buen tiempo de novios y le habla por teléfono la chica a él y le dice: —¡Mi amor, siempre hablamos por teléfono y me mandas mensajitos, pero yo quiero salir algún lado contigo, ir al cine, que me regales flores!— y él le responde, —Pero mi vida, tu sabes que te quiero mucho y que llego del trabajo muy cansado, por favor compréndeme. Tengamos presente que el amor debe ser concreto, siente que San Vicente nos lo dice a nosotros también «amor afectivo y efectivo», no es un amor de solo palabras, sino un amor en completa acción, un amor concreto; Recuerda que el amor se expresa tanto en acciones pequeñas como en actos heroicos, así seremos hijos del Padre que está en el cielo porque él hace salir el sol sobre malos y buenos. (José Carlos Bermejo, 2008)

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